- La Fundadora y Directora Ejecutiva de Corporación Opción participó como Consejera el INDH junto a otros referentes en materia de niñez.
¿Es suficiente una defensoría del pueblo para la defensa de los derechos humanos de la niñez y la adolescencia en Chile? Bajo esta interrogante se desarrolló el seminario organizado por el Centro Iberoamericano de Derechos del Niño (CIDENI), que fue emitido de manera online este miércoles a las 12:30 horas.
La instancia permitió debatir en torno a la institucionalidad de los Derechos Humanos de la niñez y la adolescencia en Chile. En ella participaron cuatro expertos en esta materia, quienes dieron sus puntos de vista en torno al debate sobre la eliminación de la actual Defensoría de la Niñez y el paso a una “Defensoría de los Pueblos”.
“Creo que hoy el gran desafío es trabajar la interseccionalidad de los derechos humanos. Debemos generar una nueva institucionalidad de derechos humanos fuerte y poderosa, con una dirección superior colegiada y paritaria, de acuerdo a los Principios de Paris, en que cada miembro de este poder colectivo este dedicada(o) con jornada completa y dedicación exclusiva a la defensa de los derechos humanos de niñas y niños, mujeres, personas con discapacidad, pueblos indígenas, diversidad y disidencia sexuales; en una suerte de relatoría temática y que pueda enfrentarse de manera fortalecida e interseccional a la promoción y protección de los DDHH (…) Esto va a permitir que los niños, niñas y adolescentes entren por la puerta ancha de los derechos humanos”, explicó Consuelo Contreras, Consejera del Instituto Nacional de Derechos Humanos.
Patricia Muñoz, Defensora de la institucionalidad actual de los Derechos de la Niñez, en cambio, destacó que “para nosotros como Defensoría de la Niñez, y es lo que ya hemos planteado a la Convención Constitucional, nos parece imprescindible que en el abordaje de esta nueva carta fundamental se entienda el desafío que es integrar a este grupo de la población en un sentido real y profundo. Eso implica no solo el reconocimiento explícito de ellos y ellas como sujetos de derechos (…) sino que también a que su participación efectiva e incidente debe ser un derecho que esta carta les asegure (…). Por eso, estamos ciertos de que su eliminación (Defensoría de la Niñez) constituye un severo retroceso en los derechos de los niños y una evidente vulneración al principio de no regresividad”.
En tanto, Luis Pedernera, Ex Presidente y actual Consejero del Comité de Derechos del Niño, manifestó que el gran problema que el Comité ha detectado, y ha provocado reforzar la postura de instituciones independientes de defensorías de derechos de la niñez, ha sido la invisibilización de la cuestión de la infancia (…) La intergeneracionalidad hizo desaparecer la infancia como un tema prioritario para la agenda, frente a la diversidad de cuestiones que plantea este escenario (…) Mi preocupación sería que el proceso constituyente desconociera todo lo generado y aprendido en estos cuatro o cinco años que tiene la defensoría instalada.
Finalmente, Miguel Cillero, Presidente de CIDENI, rescató del debate que “todos queremos un sistema de protección de derechos humanos fuerte. Además, coincidimos en que los niños, niñas y adolescentes no son sujetos separados del resto. Las instituciones democráticas en su conjunto son las que van a favorecer la protección de ellos y ellas, y de su desarrollo integral, no solamente aquellas entidades especializadas. Convenimos en que hay un problema de visibilidad y prioridad respecto de los derechos de los niños y niñas que hay que atender. Y, por último, estamos en conocimiento que el proceso constituyente está inserto en una estructura, que tenemos que hacernos cargo de lo que hay y lo que va a venir, que tenemos que ver cómo vamos a transitar de un lado a otro”.